El cuadro azulgrana derrotó 3-1 al Villarreal y el efecto Xavi se prolonga.
En un partido cargado de polémica, el Barcelona derrotó 3-1 al Submarino Amarillo y prolongó el buen momento que vive con su nuevo entrenador, Xavi Hernández, quien acumula dos triunfos seguidos que dejan al cuadro azulgrana en el séptimo puesto pero muy cerca de los equipos que marchan del cuartos al sexto lugar.
Fue la primera victoria de visitante del cuadro azulgrana en la temporada.
Polémico
Villarreal fue mejor desde el inicio pero no solamente no tuvo acierto en su ataque, sino que se vio perjudicado luego de que el árbitro no marcó un claro penal por una mano de Gerard Piqué adentro del área. Era penal pero ni el árbitro ni el VAR lo avalaron.
Y pese a su dominio, el Villarreal no pudo anotar en el primer tiempo que terminó con un cerrado 0-0.
Sin embargo, en el segundo tiempo el Villarreal recibió un duro golpe luego de un gol del holandés Frankie de Jong quien abrió el marcador luego de que el árbitro determinó que no hubo fuera de lugar en la jugada ofensiva de los azulgrana.
Villarreal reaccionó con varios cambios que efectuó el técnico Emery y consiguió el empate por medio del nigeriano Samu Chukwueze, al minuto 76.
Y cuando el cuadro local parecía estar más cerca del triunfo, otro error individual acabó decidiendo el duelo a favor de los catalanes luego de que Memphis Depay convirtió el 2-1 tras un error defensivo del cuadro local.
Y ya sobre el final del partido, una falta del argentino Juan Foyth sobre Coutinho fue sancionado como penal, el cual fue convertido por el mismo brasileño para el 3-1 del equipo azulgrana.