Costa Rica se convirtió en el primer país de Latinoamérica en reanudar su torneo de fútbol, casi al mismo tiempo que en Guatemala y México se suspendían los certámenes para seguir el camino de Honduras, El Salvador y Panamá, por lo que el presidente tico, Carlos Alvarado, aseguró que el balompié es un aliciente para la salud mental de la población, agobiada por la pandemia del Coronavirus.
Costa Rica ha hecho historia, ya que es uno de los países latinoamericanos que de mejor forma ha controlado la pandemia del COVID-19 y también ha sido el único de los torneos importantes de la región que reactivó su campeonato en la fecha 16.
“En el caso del fútbol hay una ventaja porque hay organizaciones encargadas, que son la federación y los equipos, y se hace sin público. Y tiene una ventaja colateral, que es la salud mental”, comentó el mandatario para justificar la autorización para que el fútbol volviera a la actividad.
Alvarado dijo que el Ministerio de Salud llevó a cabo un amplio análisis para determinar si los jugadores podrían correr algún riesgo, pero luego de determinar que el país tiene controlada la propagación del coronavirus se decidió autorizar los partidos de fútbol.
“Hay muchas personas que pueden disfrutar otra vez del fútbol, y podrá sonar superficial, pero para mucha gente es importante tener una distracción porque la salud mental es una de las preocupaciones grandes que tenemos”, añadió el mandatario, quien dijo que cada entrenamiento y partido se lleva a cabo bajo un estricto protocolo sanitario.
Los medios costarricenses destacaron que el retorno del fútbol tico significó un ingreso de 33 millones de dólares en derechos de transmisión televisiva internacional, ya que 61 países transmitieron varios de los partidos que se han disputado hasta el momento.
“El mundo está observando los encuentros. Hemos recibido llamadas de Argentina, Estados Unidos, Honduras, El Salvador, México, Francia, España y otras naciones preguntando por nuestro protocolo y qué habíamos hecho nosotros para poder retornar”, comentó Julián Solano, presidente de la liga de primera división.
Las autoridades de Costa Rica también permitieron la apertura de algunos comercios y la presencia de personas durante tres horas en las playas, luego de haber controlado de forma eficiente la pandemia del Coronavirus.