Barcelona aplasta a la Real Sociedad

El Barcelona de Ronald Koeman se impuso por 6-1 a la Real Sociedad, lleva 16 fechas sin conocer la derrota, acumula cinco victorias consecutivas en La Liga y es el único escolta del Atlético de Madrid.

Por suerte para el Barcelona, que hasta entonces no tenía demasiada profundidad, apareció el gol. Messi buscó a Jordi Alba, como suele hacerlo, y el lateral filtró un pase al medio ideal para que Ousmane Dembélé empuje el balón a gol. Axel Remiro se lució con su tapada, pero en el rebote Antoine Griezmann no falló y puso el marcador 1 a 0.

Con la ventaja, la confianza del elenco catalán se acrecentó y sobre el final de la primera mitad pudo gritar el 2 a 0. Nuevamente La Pulga fue clave, en este caso para asistir al otro lateral, Sergiño Dest, quien tras dominar el esférico quedó mano a mano y sacudió con tiro bajo y cruzado que se transformó en el segundo de su equipo.

Los dos laterales clues, Dest y Alba, fueron los protagonistas del 3-0, ya que el español desbordó por izquierda y lanzó un buscapié que encontró al nacido en Estados Unidos, quien tapó el despeje de uno de los defensores y, sin quererlo, metió la pelota dentro del arco.

Tres minutos después fue el turno de Lionel Messi. Sergio Busquets sorprendió con un pase flotado para el argentino, quien en posición de centrodelantero se escabulló sin pelota entre los centrales y cuando el esférico le picó delante, lo punteó de zurda para descolocar al arquero y estampar el 4-0.

A los 70 minutos el que festejó fue Dembélé, a quien le habían anulado uno por fuera de juego instantes antes. Esta vez, el francés recibió en el círculo central y fue avanzó varios metros con la pelota dominada mientras los jugadores de la Real Sociedad retrocedían y lo miraban. Fue así que el punta se metió en el área, se acomodó para la zurda y desenfundó un remate cruzado que se coló abajo contra un palo para el 5-0.

 El sexto llegó tras una nueva proyección de Alba, esta vez tras asistencia de Riqui Puig que había entrado minutos antes, y un centro atrás que el rosarino solamente tuvo que empujar.