El ex directivo guatemalteco, Rafael Salguero, y el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, son acusados por fiscales federales de Estados Unidos de recibir millonarios pagos por dar sus votos para la designación de los Mundiales de Rusia y Catar cuando formaron parte del Comité Ejecutivo de la Federación Internacional.
El ex dirigente guatemalteco, Rafael Salguero, quien se declaró culpable de otras acusaciones en el marco del escándalo de FIFA-GATE que estremeció el mundo en 2015, ahora es acusado de haber recibido un millón de dólares por dar su voto para la designación del Mundial de Rusia 2018.
Mientras tanto, el ex presidente de la FIFA, Joseph Blatter, se le acusa de haber recibido el doble de sobornos millonarios para la designación de ese mismo Mundial y para Qatar 2022.
En el ojo del huracán
Rafael Salguero fue uno de los dirigentes guatemaltecos que fueron acusados –junto los federativos Brayan Jiménez y Héctor Trujillo- de haber recibido sobornos por votos y por derechos de transmisión de televisión, por lo que hace algunos años fueron condenados por las autoridades estadounidenses que determinaron su culpabilidad en el marco de la enorme corrupción que se descubrió en el seno de la FIFA durante la gestión de Joseph Blatter.
Salguero fue inhabilitado de poder participar en cualquier organización futbolística pero no fue puesto en prisión luego de declararse culpable, mientras que Jiménez y Trujillo recibieron condenas en Estados Unidos, al tiempo que los actos de corrupción descubiertos por las autoridades le costaron el puesto a Blatter como el “magnate” de la FIFA.
Sin embargo, la investigación de los fiscales estadounidenses continuó con su rumbo y esta semana dieron a conocer otros hallazgos, en los cuales se hizo del conocimiento que Rafael Salguero recibió un millón de dólares por dar su voto para que Rusia obtuviera la sede del mundial de 2018, mientras que el entonces presidente de la CONCACAF, el trinitario Jack Warner, habría recibido cinco millones.
Jospeh Blatter, acusado
Los nuevos resultados de la investigación de los fiscales federales estadounidenses indican que Joseph Blatter recibió millonarios sobornos para ayudar a que Rusia obtuviera la plaza, igual que Catar en 2022, lo cual intentó desmentir este martes el suizo indicando que la designación de este último torneo se produjo debido a una fuerte presión política.
“Fue una intervención política. Había un acuerdo de caballeros en el seno del Comité ejecutivo de la FIFA: el Mundial-2018 a Rusia y el Mundial-2022 a Estados Unidos”, declaró el expresidente de la instancia, que sigue suspendido.
“Lo he dicho y lo repito: ha habido una intervención política para atribuir el Mundial-2022 a Catar, es todo. En este tipo de decisiones, se dio una intervención política de alto nivel”, añadió Blatter.
Rafael Salguero se declaró culpable en 2018 de los cargos que le habían efectuado por recibir coimas para otorgar los derechos de transmisión y otras acusaciones, pero por el momento no se ha pronunciado acerca de estos nuevos señalamientos en su contra.
Hay que recordar que las elecciones de Rusia y de Catar se realizaron en diciembre de 2010 y fueron históricas porque nunca antes se habían elegido dos sedes en la misma Asamblea de la FIFA, y luego del paso de los años se ha establecido que gran cantidad de dirigentes recibieron millones de dólares para designar ese mismo día las dos sedes.
En esas votaciones, Estados Unidos era el favorito para ganar la sede; sin embargo, en forma sorpresiva la elección se inclinó para Catar por 14-8 luego de que varios directivos recibieron millonarios sobornos para dar sus votos.
Según Blatter, si este acuerdo para el Mundial-2022 en Estados Unidos fracasó, fue debido a la interferencia gubernamental de Nicolas Sarkozy, entonces presidente de la República Francesa.