La esperada celebración del Liverpool por coronarse campeón en el fútbol de Inglaterra tendrá que esperar unos días más, ya que su más cercano perseguidor, el Manchester City goleó 5-0 al Burnley en el Etihad Stadium y matemáticamente todavía tiene posibilidades de pelearse un milagroso título al cuadro que dirige Jurgen Klopp.
La contundente victoria del equipo de Guardiola impedirá que el Liverpool pueda proclamarse campeón de la Premier League si derrota este miércoles al Crystal Palace.
El joven inglés Phil Phoden, a los minutos 22 y 63, y el argelino Riyad Mahrez, a los minutos 43 y 45+3, de penal, contribuyeron a la clara victoria del Citizen con dos golea cada uno, mientras que el español David Silva anotó otro de los tantos al minuto 51.
Desde el retorno de la Premier League luego del Coronavirus, los jugadores y árbitros pusieron una rodilla en el césped en señal de apoyo a la discriminación racial, pero minutos antes una avioneta sobrevoló el estadio con un mesaje en el que leía: “White lives matter Burnley” (“La vida de los blancos cuenta”), un eslogan utilizado por la extrema derecha que lucha contra el movimiento antirracista “Black Lives Matter”, que denuncia la violencia policial contra la comunidad negra.
La avioneta sobrevaloró durante varios minutos en el cielo de Manchester y luego desapareció, pero el Burnley reaccionó rápidamente a través de un comunicado para “condenar con fuerza” la pancarta y a los responsables de esta acción, luego de determinar que eran fanáticos de su equipo.
El capitán del Burnley, Ben Mee, dijoque sentía “vergüenza” por la actitu de los fanáticos de su equipo. “Es bochornoso que un pequeño número de nuestros fans decidido dar vueltas a eso (el avión) sobre el estadio”, analizó.
“Esa gente necesita entrar en el siglo XXI y ser educados como muchos de nosotros lo hemos sido. estoy muy afectado por lo que ha ocurrido”, agregó con tono molesto el capitán.
El claro trtiunfo del Manchester City dejó también la preocupante lesión de Sergio “el Kun” Agüero, quien sufrió una fuerte entrada que obligó al árbitro a pitar un penal.
El técnico del Burnley tuvo problemas para completar su plantilla titular, ya que aparte de tener a dos jugadores lesionados otros cinco futbolistas se negaron a jugar luego de que su contrato termina el 30 de junio y la directiva aún no les ha renovado.