La selección mexicana inauguró la Copa Oro con un frío y polémico empate a cero goles ante Trinidad y Tobago.
México inició la Copa Oro con empate sin goles ante Trinidad y Tobago en un duelo que se vio empañado por la lesión de Hirving Lozano, el pésimo arbitraje y el grito discriminatorio de la afición.
La Selección Mexicana se fue al frente en los primeros minutos, pero poco pudieron hacer para batir la portería de los trinitarios, que a base de faltas y jugadas polémicas lograron mantener el 0-0 en los primeros minutos.
Tristemente al minuto 11 Irving Lozano tuvo que salir del juego luego de una terrible lesión que lo mandó al hospital. El reporte de la Federación Mexicana de Futbol es que el jugador del Napoli está estable, consciente y le harán los estudios correspondientes.
La segunda mitad nada cambió, México siguió atacando pero sin ser efectivo, incluso Funes Mori marcó ya sobre el final, pero el árbitro no concedió el gol y marcó fuera de lugar.
Además el grito homofóbico se hizo presente en el encuentro al 85 y 94 por lo que tuvieron que detener las acciones para que la gente se calmara. No hubo más y terminaron 0-0.